El anuncio de reformas tributarias, constitucionales y laborales ha generado polémica en el país, dando lugar a diversas posiciones y opiniones.

Las reformas fiscales, constitucionales y laborales impulsadas por el poder ejecutivo han provocado diferentes reacciones entre la población dominicana y han creado un sentimiento de incertidumbre entre la población respecto de los cambios que podrían alterar los fundamentos del país en materia política y laboral, pero especialmente financialmente.

Entre las opiniones más comunes está que muchos dominicanos han expresado su descontento y se han opuesto a la reforma tributaria, argumentando que el país se encuentra actualmente en una profunda crisis económica que sólo empeorará con el aumento de precios y la imposición de nuevos impuestos.

“No es el momento adecuado ni apropiado para implementar esta reforma ahora. No es momento de reformas en esta crisis que hay porque estamos pasando por momentos difíciles, no podemos comer bien y alimentarnos, entonces los precios están subiendo”, dijo Johnny Castillo mientras hacía una pequeña compra realizada en una tienda de abarrotes. . .

Asimismo, Ramón Guzmán, quien se gana el pan de cada día como gerente de banco en el Ensanche la Fe, expresó preocupación por el deterioro de los impuestos y la caída en las ventas que esto podría significar para su empresa.

En cambio, hay quienes defienden la necesidad de una reforma tributaria y la consideran esencial para el desarrollo y la estabilidad financiera del país, a pesar de sus efectos potencialmente adversos.

Creo que todavía es algo necesario para el país, aunque entiendo que hay puntos que hay que evaluar porque nos puede afectar a nosotros, los más vulnerables, en el corto o largo plazo.dijo Omar Ruiz, quien se dedica a la venta de pollos.

por su parte Leonardo MonegroEl doctor en derecho expresó su apoyo a la reforma tributaria y señaló que la razón por la que muchos se oponen a la reforma es porque no existe una cultura de pago de impuestos.