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Publicado por Redaccion Diario55 | opinión | Viernes 21 de agosto de 2020

En la nueva conformación de los mandos de las fuerzas armadas y la policía nacional, no se excluye que un gran número de oficiales retirados que forman parte de la reserva volverán a ocupar la jurisdicción de estos organismos, medidas previstas en las facultades previstas en el artículo 198 de la Ley. La constitución de la república se otorga al jefe de estado supremo, el presidente.

La Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas, marcada con el número 873, contiene en sus artículos 18, 19 y 20 las condiciones para la reintegración de los militares a las instituciones que hayan sido honrados en el retiro. Los dos requisitos principales de esta ley son que los soldados puedan regresar y estar en buenas condiciones físicas.

La misma situación se aplica a los miembros de la Policía Nacional y otros organismos de seguridad nacional. Tomando nota de que el nuevo Ministro de Defensa, unidad integrada por el Ejército de la República Dominicana (ERD), la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD) y la Armada de la República Dominicana (ARD), es el Teniente General Carlos Luciano Díaz Morfa, con gran parte de su mandato junto al ex presidente Hipólito Mejía, no hay duda de que estos «arreglos» se harán.

Este oficial que fue comandante general de la ERD es uno de los más experimentados y cuenta con una nómina de soldados retirados como activo de la absoluta confianza de este sector. No es necesario ser alguien para saber que habrá cambios masivos en el ejército, incluida la fuerza policial, muchas promociones y jubilaciones. ¡Todo basado en la constitución y la ley!

Es el problema de la falta de instituciones en el país. Con base en la Constitución de 2010, el Presidente de la República, Luis Abinader, tiene la potestad de realizar estos cambios.

Desafortunadamente, estos cambios requerirán muchos oficiales generales, coroneles, mayores, capitales y tenientes capacitados con los recursos del pueblo. La mayoría de ellos son oficiales honestos y están listos para servir al país. Citamos a los oficiales porque los cambios rara vez afectan a la base, a los suboficiales y a los sargentos.

El país ha dado grandes pasos en la carrera administrativa del Ministerio de la Función Pública (MAP), que protege a los empleados públicos afiliados, y otros pertenecientes a determinadas carreras de especialidad, como el ministerio público y la educación.

Necesitamos pensar en la carrera militar tal como existe en los Estados Unidos, donde los cambios de gobierno no afectan a los soldados, con algunas excepciones como lo establece la Constitución de América del Norte, pero que casi siempre necesita la aprobación del Congreso.

Cuando proponemos una carrera militar, estamos incluyendo a la Policía Nacional, que ya no es un cuerpo civil sino armado.

¡Dejamos abierta esta tarea!

En cuanto a la propuesta de algunos sectores que piden al gobierno del presidente Luis Abinader con menos de 40 días en el poder que cambie el modelo económico, tenemos que decir que pueden ser bien intencionados pero no reflejan la realidad.

¿Cómo se llama a un gobierno que todavía está compuesto por el nombramiento de los responsables de las áreas del estado para cambiar el modelo económico actual, que, incluso con buenas intenciones, no será posible dentro de unos años?

El problema no es cambiar un modelo económico que está dando buenos resultados para el país, ya que continúa desarrollando sus relaciones comerciales internacionales, aumentando la producción agrícola e industrial y facilitando la inversión nacional y extranjera. Ahora ni siquiera se trata de hacer mejoras a los hospitales con pacientes de COVID-19 y la tierra «sembrada» de cadáveres. ¡Ahora es la búsqueda de recursos para contrarrestar la pandemia!

Durante el reinado del presidente Danilo Medina, el producto interno bruto (PIB) aumentó a más del 6%, uno de los más altos de América Latina. Incluso con la pandemia, los dominicanos no tenemos escasez de productos. Esta es una demostración del éxito del trabajo de este gobierno junto a empresarios, industriales, innovadores, agricultores que continúan produciendo alimentos u otros sectores motivados por estas autoridades, como es el caso de los constructores.

Los modelos económicos no cambian en meses, sino en años de trabajo. La modernización del país es parte de este mejor modelo económico porque genera empleo y divisas. El comercio es parte del crecimiento del PIB. ¡Y aquí es donde tiene que viajar el nuevo gobierno! Porque las herramientas están ahí, al igual que los sistemas productivos.

El expresidente Hipólito Mejía ha sido criticado por su Partido Revolucionario Moderno (PRM) por su versión de que la construcción del proyecto residencial del profesor Juan Bosch en Santo Domingo es un buen trabajo del presidente Danilo Medina, quien ahora es exjefe de Estado. ¡Y este trabajo es malo! No. Debemos apoyar todas las cosas buenas que un gobierno determinado hace por el bien del país. Si el nuevo presidente Luis Abinader hace buenas obras, no hay razón para decir que son malas.

Ahora el país quiere que el gobierno aumente el gasto en la lucha contra el COVID-19. ¡Pero el gasto no aumenta el PIB! La mente, no solo de los dominicanos sino del mundo, está obsesionada con encontrar una vacuna que detenga el COVID-19 y hacer todo lo posible para reducir el número de enfermos y muertos por la pandemia.

Al igual que el presidente saliente Medina, el jefe de Estado hoy está preocupado por la grave situación que sigue provocando el COVID-19 en los asuntos económicos y sociales. Cabe señalar que la crisis económica y social será mayor si el gobierno de PRM cancela a más de 400.000 servidores públicos que ya han llevado una vida equilibrada, especialmente los más necesitados. ¡Pero el PRM es el ganador de las elecciones!

Este será un gran golpe que afectará el crecimiento del PIB ya que muchos de estos servidores ya no tienen los fondos para pagar el alquiler de las casas, los pagos mensuales de los pequeños departamentos o vehículos. Muchos de estos empleados que son de edad avanzada están excluidos del entorno productivo o laboral.

No entendemos cómo hay sectores que exigen que el presidente Abinader cambie el modelo económico en situaciones de crisis extremas como las provocadas por COVID-19. El proyecto de Abinader parece ser bueno, pero la presión interna y externa podría derrocar al gobierno.

Para conseguir que el país creciera más del 6%, el gobierno de Medina invirtió miles de millones de pesos en el sector productivo y prestó préstamos con el menor interés, sin exigir un papelito a los fabricantes como garantía a la tierra. mejorar la educación en un 4%, con su lote ampliado imponiendo un nuevo estilo de construcción y restauración para hospitales, incluyendo beneficios para el país como: B. Estancias de niños.

Tanto si simpatiza con el gobierno de PRM como si no, este no es el momento de pedirles que hagan cosas que actualmente no son posibles. ¡Que cada ministerio o dirección general organice su trabajo y lleve a cabo las acciones según sus posibilidades!

Lo que podemos recomendar es que el gobierno haga todo lo que esté a su alcance para no crear muchos frentes negativos, ya que este es un problema importante para la estabilidad emocional del país y afecta aún más el crecimiento del PIB.

¡Gracias por leer!



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