SANTO DOMINGO.- Aunque en ningún momento declararon estar en contra de la unificación de elecciones, el pleno de la Comisión Central Electoral (JCE), en su reunión con la Comisión bicameral para el Proyecto de Reforma Constitucional, se esforzó en demostrar que Ser complicado un montaje de estas dimensiones.

La organización hizo comparaciones entre los juicios de 2016, 2020 y 2024, mostrando que estos últimos fueron mucho más complejos ya que implicaron la introducción del voto preferencial, la creación de nuevos niveles electorales y el crecimiento del censo electoral.

Es decir, en las elecciones locales, los vecinos de los municipios y direcciones municipales tenían en sus manos dos papeletas de voto (alcaldes y concejales, directores y vocales, según el caso) en lugar de una sola, que debía ser revisada en al mismo tiempo para determinar los votos del juego.

La JCE propuso que la unificación de elecciones significaría que por primera vez se conocerían los tres niveles plurinominales en un mismo proceso electoral, lo que daría como resultado que siete niveles de elecciones se realizaran juntos, donde cada elector tuviera al menos tres niveles y cinco. papeletas de votación en sus manos.

Esto ralentiza el proceso ya que a cada elector le tomaría entre cuatro y siete minutos emitir su voto y si se cumple este tiempo, en una mesa electoral con 600 electores solo votará el 40% de los electores registrados.

Otras complejidades
Todo esto provocaría largas colas en las urnas y el agotamiento de todos los actores involucrados en el proceso y los resultados del nivel electoral sólo se conocerían en las primeras horas de la mañana, lo que generaría incertidumbre en los niveles restantes y conflictos electorales polémicos en aumento. .

Por lo tanto, de aplicarse la unificación del proceso, la JCE se vería obligada a reducir el número de electores por mesa en un 50% y/o duplicar el número de mesas.

En el último procedimiento, cada colegio electoral contaba con 600 electores y el número total de electores era de 17.389, mientras que el número de empleados allí era de 86.945, cifra que aumentaría a 149.985 miembros del colegio electoral.

Asimismo, sería necesario ampliar una hora la jornada de votación a las seis de la mañana, lo que significaría una nueva modificación a la Ley 20-23 de régimen electoral.

Voto preferencial
Los miembros de la JCE también propusieron abolir los votos preferenciales para Regidurías y Vocalías (los niveles con mayor número de candidatos) e introducir listas cerradas y bloqueadas, ya que el modelo actual sería insostenible.

Se observa que el número total de concejales es de 1.164, de los cuales al menos cinco por distrito, y que el número de afiliados es de 735 (no menos de tres ni más de cinco por distrito municipal), lo que significa que cada organización política cuenta con 1.899 los candidatos tendrían.

Si se aumentara el número de colegios electorales, también tendrían que comprar más equipos y fortalecer el software de votación para respaldar el escaneo y la transmisión de más conexiones de votación. Otra complejidad es que los extranjeros no pueden votar en las elecciones locales.

Coordinación externa

— En el municipio
En las elecciones locales votaron 35.350 personas que visitaron el país con este propósito. A pesar del éxito, este número es pequeño en comparación con las abstenciones registradas en este proceso, por lo que no hay que molestarse en sacrificarlo.

El voto digital como opción
Modernidad. Como alternativa para evitar los excesivos costos y la complejidad del voto manual, la JCE contempla incrementar el uso de la tecnología y prepararse para el uso de votos y controles automatizados, espectro que evitaron en el pasado proceso electoral por la experiencia de 2020.

Las opciones incluyen votación manual con conteo automático e informe de resultados; un modelo totalmente automatizado o pasar a otras tecnologías, lo que a su vez requiere reforma electoral, compra de equipos, licitaciones, capacitación del personal y auditorías.

Finalmente, la JCE enfatiza que independientemente del resultado final de la reforma constitucional, será ella la responsable de organizar el proceso.