Publicado por Redaccion Diario55 | opinión El | Lunes 29 de junio de 2020
Desde la muerte de Trujillo, hemos participado en elecciones electorales en las que hemos estado participando durante casi 60 años sin comprender la importancia de votar. Y cada cuatro años nos sorprende votando por lo que dice una encuesta manipulada.
Estamos siendo manipulados por discursos vacíos de contenido, por títeres aspirantes sin su propia luz, que usan agendas ocultas para explotar la debilidad del electorado, por lo que Danilo tiene la intención de vendernos un candidato presidencial inepto.
Como si se sintiera atraído por la ignorancia de un pueblo que no es muy meditativo, que no ha aprendido a fortalecerse y a embarcarse en un verdadero camino democrático de derechos, libertades y desarrollo en el transcurso de más de medio siglo.
Cada cuatro años, dejamos nuestro destino a aquellos que, como los buitres que buscan carroña en la jungla, usan trucos para acortar la determinación de los ciudadanos de elegir libremente y ser elegidos a través de la conciencia.
No entendemos que la «votación por error electoral» lleva cuatro años o más, y que este proceso no puede confundirse con un carnaval de tropas porque las travesuras de un gobierno traen lágrimas en lugar de rizos.
Muchos creen que se justifican diciendo «No voté», pero son las mismas personas que no han usado bien al gobierno si ya se están quejando. Cuando la campaña continúa, nadie sabe quién es el político corrupto y decente.
En casi seis décadas, la población aún no se ha dado cuenta del poder de votar, e incluso la Misa Silenciosa de Balaguer no parece existir. La población elige a los que regalan botellas de ron chantajeadas con dinero público, con suerte prevalecerá el voto consciente.
Bosch intentó que la gente se diera cuenta de esto, pero la edad y las circunstancias no le permitieron hacer el trabajo. Dejó esto a los estudiantes, pero prefirieron el parasitismo político como los demás para aprovechar las deficiencias.
En una sociedad donde prevalecen estos métodos de elección, es imposible construir una democracia real. Por otro lado, cualquier elección que haga en términos de estado de derecho, igualdad y más pobreza lo deja atrás.
Hemos celebrado unas 15 elecciones desde 1961, sin elecciones a tiempo parcial, y todavía existe el riesgo de vacío, fraude y la elección de candidatos incompetentes, ojalá algún día no lleguemos al peor abismo.
El voto no lo tomará quien gane una encuesta, ni el que ofrezca sin definir objetivos de cómo hacer lo que se prometió. Las urnas votarán las propuestas que conduzcan al desarrollo y al bienestar de todos.
Mientras votemos sin examinar las acciones de los políticos, continuaremos siendo rebajados al matadero, y luego pasaremos un tiempo quejándose. Salchicha con pan, un tanque de gasolina que apaga nuestro hambre hoy.
Pero tenemos que soportar esta decisión impredecible durante cuatro años y sufrir las consecuencias. Es la única vez que tenemos el poder de castigar a quienes se burlan de nuestras necesidades. El futuro del país también depende de ello.
Es hora de actuar en el camino y votar con conciencia por aquellos que garantizan la estabilidad económica y democrática de la gente, elegir propuestas para no (tirar) el voto y allanar el camino a la perversión.
Vayamos a la votación sin temor a nada y tomemos precauciones como lo hacen los polacos, teniendo en cuenta el interés general, no el especial. Cuida tu voz, porque la dirección que tomamos como personas depende de tu elección.
alex15958@hotmail.com
Twitter, @ alexalma09